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El fervor del pueblo margariteño se vio desembocado en los
alrededores de la Basílica Menor de El Valle del Espíritu Santo, en el
encuentro inaugural de las festividades conmemorativas de los 101 años de
coronación canónica de la patrona de los margariteños.
Una acalorada multitud de
fieles esperó desde primeras horas del día la tan anhelada bajada de la imagen
de la Virgen de los pescadores, quienes año a año se dan cita en Nueva Esparta
para rendir tributo a la excelsa imagen de Nuestra Señora del Valle.
La santa misa estacional,
oficiada por Monseñor Jorge Anibal Quintero, Obispo de Margarita, regaló un
mensaje de unión y esperanza, signado en el apoyo a las necesidades del
prójimo, “ese es el legado a tomar y poner en práctica”. Llamó al compromiso
sincero en palabra y acciones que luego puedan ser presentadas como sacrificio
a la Madre de Dios. Fuegos artificiales y efusivos aplausos cerraron este
primer encuentro con la Virgen de todos los insulares.
La iglesia permaneció abierta
hasta altas horas de la noche para que todos sus devotos se acercaran a saludar
la imagen mariana.
Devoción La bajada de la Virgen
fue una nueva oportunidad de encuentro dentro de la comunidad creyente y devota
de la sagrada Virgen María bajo la advocación mariana de la Virgen del Valle.
Monseñor Quintero exhortó la necesidad de que las acciones de la feligresía se
correspondan con sus creencias cristianas, en reflejo del amor que el hijo de
Dios dejó como ejemplo en la tierra
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